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martes, 5 de julio de 2011

edeljuarez

Ni tu amor era tan grande ni la paciencia mi condena, ahora que no me mata la espera me mata el necesitarte, tanto se dijo de ti, tanto planear juntos que apuro a barrer mi casa, yo no quiero recuerdos tuyos. Fui tu vida más breve, tu amor eterno inconcluso, fui todo lo que soñé que pude ser a tu lado, todo lo fuimos, todo se vivió en algún sitio, más no fui motivo y me duele perder lo que nunca he tenido. Ahora retomo las frases, me hago un nudo con el ombligo, vuelvo a mirar lo que tengo, lo que nunca fue tuyo ni será de nuevo mío, aprendo a amarte de a pocos, media de amor y media de olvido. Por si volvieras me quedo con algunos planes, con todo el valor, pero tonto que soy, el daño lo olvido.
http://edeljuarez.blogspot.com/

domingo, 10 de abril de 2011

Son madrugada

En estos momento dan ganas de marcarte
ser un incosciente de la hora de la madrugada
huyes, te escabulles
dices cosas que interpreto mal

con sonidos de jarana
corazones de jade
una que otra cerveza y ...vualá

ritmo ritmo con algo de ska, regae
cuantas ganas de meterme entre tus brazos
aunque sea inmenso abarcarías mi alma
no mi cuerpo

un suspiro se escapa
envuelto en humo de tabaco
ufff que calor

que ganas de decirte te quiero... te quiero te quiero te quiero x 100 ó x 1000

martes, 29 de marzo de 2011

Capitulo 93 - Rayuela

Pero el amor, esa palabra... Moralista Horacio, temeroso de pasiones sin una razón de aguas hondas, desconcertado y arisco en la ciudad donde el amor se llama con todos los nombres de todas las calles, de todas las casas, de todos los pisos, de todas las habitaciones, de todas las camas, de todos los sueños, de todos los olvidos o los recuerdos. Amor mío, no te quiero por vos ni por mí ni por los dos juntos, no te quiero porque la sangre me llame a quererte, te quiero porque no sos mía, porque estás del otro lado, ahí donde me invitás a saltar y no puedo dar el salto, porque en lo más profundo de la posesión no estás en mí, no te alcanzo, no paso de tu cuerpo, de tu risa....

Julio Florencio Cortázar

lunes, 21 de febrero de 2011

Instrucciones Para Cambiar El Mundo(Subcomandante Marcos)


INSTRUCCIONES PARA CAMBIAR EL MUNDO

I. Constrúyase un cielo más bien cóncavo. Píntese de verde o de café, colores terrestres y hermosos.

Salpíquese de nubes a discreción.

Cuelgue con cuidado una luna llena en occidente, digamos a tres cuartas sobre el horizonte respectivo. Sobre oriente inicie, lentamente, el ascenso de un sol brillante y poderoso. Reúna hombres y mujeres, hábleles despacio y con cariño, ellos empezarán a andar por sí solos. Contemple con amor el mar. Descanse el séptimo día.

II. Reúna los silencios necesarios.

Fórjelos con sol y mar y lluvia y polvo y noche. Con paciencia vaya afilando uno de sus extremos. Elija un traje marrón y un pañuelo rojo. Espere el amanecer y, con la lluvia por irse, marche a la gran ciudad.

Al verlo, los tiranos huirán aterrorizados, atropellándose unos a otros. Pero… ¡no se detenga!… la lucha apenas se inicia.

LAS DEFINICIONES

El Mar: Es ancho y húmedo, salado. Se mira siempre de frente y con entereza. Al final uno sale limpio e invencible.

Amar sigue siendo difícil… andar también. En el mar hay muchas cosas, pero sobre todo hay agua, agua, siempre agua. Recuerde: no hay sed que se la beba…

El poeta: Sus primeros poemas son siempre maldiciones (los que siguen también). Se enamora seguido y cae con la misma frecuencia. Se levanta despacio sobre papel y tinta. Por reír mejor llora.

Está en peligro de extinción.

El viento: El verdadero capitán del mundo. Dirigiendo polvo y caminos se divierte con nosotros y, dicen, no lo pasa tan mal.

INSTRUCCIONES PARA OLVIDAR Y RECORDAR

Sáquese despacio ese amor que le duele al respirar.

Sacúdalo un poco para que despierte. Lávelo con cuidado, que no quede ni una sola impureza.

Limpio y oloroso proceda a doblarlo tantas veces como sea necesario para tener el tamaño de la uña del dedo gordo del pie derecho. Espere el paso de una hormiga, ser noble y generoso, y pásele la pesada carga. Ella lo llevará a guardar en alguna profunda caverna. Hecho esto, vaya y rellene, por enésima vez, la pipa de tabaco frente al mar de oriente. El olvido llegará conforme se termine el tabaco y el mar se acerque a usted.

Si quiere recuperar ese amor que ahora olvida, basta escribir una larga carta hablando de viajes desconocidos, hidras, molinos de viento, oficinas y otros monstruos igualmente terribles. A vuelta de correo tendrá su amor tal y como lo envió, acaso con un poco de polvo y sueño en la cubierta…

INSTRUCCIONES PARA SEGUIR ADELANTE

Frente a un espejo cualquiera, dése cuenta de que uno no es lo mejor de sí mismo. Pero siempre se puede salvar algo: una uña por ejemplo…

INSTRUCCIONES PARA MI MUERTE

Los que ahora dicen -¡Qué malo es!-, dirán entonces -¡Qué bueno era!-. Y yo me iré sonriendo, burlándome siempre de ellos, es decir, de mí.

INSTRUCCIONES PARA ENAMORARSE

Elija una mujer cualquiera.

Ponga cuidado en alguna parte de su cuerpo (de ella) y empiece a amarla. Aumente poco a poco su amor hasta completarla.

Hecho esto, desenamórese rápidamente, ya que el amor provoca adicción.

INSTRUCCIONES PARA NO LLORAR

“Que mientras quede un hombre muerto, nadie se quede vivo.

Pongámonos todos a morir, aunque sea despacito, hasta que se repare esa injusticia.” (Roberto Fernández Retamar).

Sobre su muerte nos fuimos levantando.

Fueron primero cinco nombres cayendo uno a uno, y juntos, en nuestra memoria. Luego vinieron a sumar su sangre otros nombres. Ya nos desgajábamos cerro abajo y la sangre juntajusta de otros más, nos devolvieron arriba. Más, en tiempos distintos, con celo juntaron toda esa sangre en la suya propia para que no se perdiera río abajo. Seguimos caminando sin mirar muy lejos y algunos más destaparon el cofre de laca para reabrir nuestra memoria, y nos obligaron a levantar la vista con su sangre. Siempre sobre su muerte nos fuimos levantando. Y así cada uno va poniendo su cuota de sangre para que otros se vayan levantando, hasta que todos de pie pongamos un nuevo sol sobre una tierra nueva.

INSTRUCCIONES PARA HACER UNA CANCIÓN

Inicialmente no es forzoso saber las notas, las rimas y ritmos. Basta con empezar a tararear alguna vieja tonada que recuerde. Repítala hasta que nada tenga que ver con la original. La letra es lo de menos, porque poemas sobran. Pero, por las dudas, cuide que nadie lo escuche… críticos también sobran…

INSTRUCCIONES PARA TENERSE LASTIMA

Pobrecitos de nosotros, tan pequeños y con toda la revolución por hacer.

INSTRUCCIONES PARA TENER ÉXITO

Decida escribir un libro.

Junte varios recuerdos (mínimo 16). Escriba un largo prólogo y, en las pocas páginas que queden, amontone los recuerdos. El índice no es necesario. Después cruce a nado el Atlántico y conquiste Europa. El libro se venderá como pan caliente.

INSTRUCCIONES PARA DESPEDIRSE

No mire hacia atrás.

Suele bastar con eso…

INSTRUCCIONES PARA MEDIR EL SILENCIO

Basta con los suspiros.

Pero no los cuente, el resultado suele ser desalentador.

INSTRUCCIONES PARA LAS LÁGRIMAS

Forme un cuenco con las manos, deposite las lágrimas una a una. Lleno el cuenco, vacíelo en un paraje extraño y forme tantos mares como sea necesario. Bautice los mares con nombres apocalípticos y hermosos. Evite las obviedades como “Mar Amargo” y “Mar de las Penas y los Gozos”. “Mar Árbol”, “Mar Sol”, “Mar Sombrero” y nombres parecidos son los más indicados.

INSTRUCCIONES PARA MEDIR LOS AMORES

Encienda la pipa y siga caminando. Recoja, con cuidado, algunos de los besos más olvidados, algunos mechones de cabello, 2 ó 3 miradas, uno que otro recuerdo de pieles blancas y morenas, un poema roto y una suela de zapato (ésta última para darle consistencia al brebaje). Revuelva todo y sazone a discreción.

Divida el resultado entre 2 tantas veces como sea necesario, hasta que no quede nada.

cómodo que se puede estar sentado en el lodo, no obstante mosquitos, moscos y moscardones.

Decidido ya a levantarse, que siempre es lo más difícil, procede esa complicada operación que consiste en apoyarse en manos y rodillas de donde fuere y tratar de poner el pesado caparazón sobre la espalda (tan sencillo, y pesado, que es llevar la casa a cuestas: apenas un plástico y una hamaca. Pero la mochila se obstina en llevar otras cosas absurdas: algunos libros de poemas, un poco de ropa, un calcetín sin su par, la medicina para el mundo, comida, una húmeda cobija…

INSTRUCCIONES PARA CAER Y LEVANTARSE

Siga caminando, cuando se dé cuenta ya estará de nalgas en el suelo, en esa posición incómoda que tienen los muñecos para estar nomás. Acto seguido procede una larga y obstinada reflexión sobre la conveniencia de quedarse ahí en el suelo. Pero ya se alejan los compañeros y la picada está lejos de parecer un claro camino, claro. Tampoco es cuestión de quedarse ahí toda la vida, con el lodo llenándome el alma y la mochila, así que llega el momento de levantarse, situación difícil e impredecible en sus resultados. Tal vez es mejor seguir en el suelo y arrastrarse poco a poco, pero, además de ser poco estético, es impracticable (creánme, lo he probado), siempre habrá alguna raíz oculta o una espina que nos retenga, y entonces nueva reflexión sobre lo conjunto de la carga pesa toneladas (sobre todo después de las primeras horas de caminata) y tiende a atorarse cada que le viene en gana, es decir, casi siempre). Ya tortuga boca abajo sigue poner un pie y alzarse sobre el otro, con la consiguiente protesta de las rodillas, el horizonte entonces se ensancha y siempre será ajeno. Con la mirada en el suelo se reemprende la marcha hasta la nueva caída, que será apenas unos pasos adelante. Y la historia se repite…”

INSTRUCCIONES PARA MEDIR DESAMORES

Basta el rencor y, finalmente, no vale la pena.

INSTRUCCIONES PARA MEDIR LA VIDA

Se toma cordel a discreción y se empieza a meter en el bolsillo derecho del pantalón hasta que ocurra una de dos cosas:

A) Que el bolsillo se llene de cordel.

B) Que se canse uno de estar metiendo el cordel en el bolsillo.

Cuando ha ocurrido una de las dos cosas arriba señaladas, o las dos, espere una tarde lluviosa.

Justo cuando la lluvia empiece a titubear en caer o no sobre la tierra, saque el cordel y arrójelo hacia arriba, lo más alto posible, con un elegante ademán de mago y, simultáneamente, murmure las siguientes palabras: “Veo, mido, existo, la vida”. Si se han seguido las instrucciones al pie de la letra, el cordel permanecerá en el aire, suspendido por unos instantes, antes de volver a tierra en un manojo de hilos. Ahí tiene usted la medida de un pedazo de vida. Si no obstante haber seguido las instrucciones, el cordel no responde como arriba indicamos, no se preocupe y pruebe con otro cordel. Sucede que hay cordeles que se niegan, con desconcertante obstinación, a medir la vida de nadie (bastantes problemas tienen con amarrar botas, zapatos y otras cosas absurdas, dicen).

Selva Lacandona, Chiapas, México. 1984-1989.

Desde las montañas del Sureste Mexicano

Subcomandante Insurgente Marcos

Ejército Zapatista de Liberación Nacional

México

Fuente:Mapueexpress

miércoles, 16 de febrero de 2011

No hay


sin sentido 1.... con cada gota que se abria paso entre la madera de las ventanas, las virutas se ponian cada vez más friolentas, entre arbuso de incienso de hoja verde y tristes imitadores del grillo cantor..se veia la timba de las luciérnagas, acostado sobre la mosaenda que ahora brilla bajo el agua... dos tres hormigas salieron del suelo húmedo y se juntaron a limpar el cementerio... trabajadoras como siempre... cada luciérnaga tenia su historia... unas se fundieron, algunas murieron por el brillo de otras... hay que cambiarles el fusible dijo una... y se rumoraba que las moscas robots volaban en entre las computadoras buscado algo que comer... y que el grillo cantor ese era un experimento genético que se habia escapado... siempre con algo en la punta de la lengua...diciendo incoherencias pero me gusta mas decírtelas a tí.. que mejor de estar escribieno es que tú lo estes leyendo

sábado, 5 de febrero de 2011

Acompáñame mujer a soñar

Siempre me llena de nostalgia cada vez que ella se marcha
se hace un silencio en el Internet que no lo lleno con música
y aunque no se oiga yo la escucho hablar
a veces me llegan cuentos completos y crónicas sin fin
a veces el viento se llevo las letras del camino y queda un lugar árido en el cuadro de texto
suelo pensar que si la quiero aunque nunca llegue darle un beso mas que con un icono
no se confunda esto con reclamo ni mucho menos como propuesta
no suelo ser así de valiente.

Hace tiempo deje una carga que llevaba en el alma
la tire junto con dos kilos de papel y dos tres lágrimas
no quiero ser la carga de nadie ni el pobrecito de nadie
que nunca se sienta lástima por mi (a nadie le gusta es)
y creo que a nadie le gusta que sean condescendientes con uno

suelo pensar mirando los barrotes de la ventanas
o el reflejo en la pared de la luz
con un arbolillo que tengo a lado de la almohada
me gusta presionar mi olfato para recordar olores
y a mi mente para recordar nombres
me gusta ver la ventana quieta y emocionarme cada vez que se pone en amarillo
¿que nueva sorpresa traerá unos pixeles a mi vida?

Tú no tienes la culpa ni yo te culpo que el cielo te haya hecho tan de mi gusto...eres el sueño de mi noche, el café de mis mañanas, el sonido de mi jarana, la pasión de baile...

Mientras seguiré bongoneando al tum tum tum tun tun de tu afroritmo cardíaco

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Te alucino


Te alucino y lo que me haces escribir.
Me alucino una luciérnaga morada con orilas verdes y antenas rosa, pasenado entre zacate afrodisiaco y gotas de rocío color naranja.
Me imagino un cienpies con botas y un puro en la boca, tocando jarana, zapateando y alzand la voz en los cielos.
Me imagino dos hormigas tomadas de las antenas, regalándose migajones de amor.
Me imagino teclas saltarinas que se despegan y se acomodan de diferente manera, como jugando ...STOOOP
Me imagino una madera aburrida de tanto mirar hacia afuera y no ver la pulpa de su interior.
Me imagino el escenario de hongos grandes y chicos, color verde con puntos rojos y tallos de fibra óptica, cada músico sentando en uno y otros debajo de uno, hormigas besándose tras el rocío... amantes miniaturas
Me imagino la misma luciérnaga entre el pasto afrodisiaco bailando con el cienpies en el hormiguero de un fandago a luna llena multicolor, llenado sus hojas enrolladas de aguardiente, con las jaranas de cedro aburridas de tanto mirar se ponen a tocar notas de madera, alucinando a un wey que ya no le atina a las teclas...
Me contengo las ganas de decirte te quiero, evitar problemas, sentimientos o culpas, evitando la pena de no oir lo que quiero... pero pues... TE QUIERO.
vaya forma de alucinarme